10.8.08
Acosándome siempre con una palabra más, con los ardides antiguos y la vida que se deslava
se lava
se va.
Sin color tus labios que muerdo sin que sangren
De las heridas emerge el aire que necesitaba respirar
Alebrestándome siempre con un susto más
Un grito
Una planta surgiendo desde la garganta
Hay entrada pero no salida en este laberinto
Día sólo día (¿cuándo hay que dormir?)
Y sin la economía de las palabras sin el trance de las voces que la sobriedad ahogaba
Sin la salvación de la metáfora (¿dónde dormir?)
Sin alguien que corrija alucinaciones múltiples el espejismo el espejo correr despacio como si fuera un cinta lenta / lenta
hasta creer que no termina
(¿para qué dormir?)
Porque mi cuerpo es novela de final abierto
-sabes a qué me refiero-
Que si se hiere corta que si corta abre sale un ojo y cicatriza párpado / cada vez que entras de descifra diferente y regresas transformado sin sospechar lo que ahora eres
Correr despacio como si no quisiera que de mi aliento fueras como si esperara la siguiente trampa y los signos vinieran a volar sobre mí
Como presagios de la mala suerte y en cualquier momento aparecierasPorque siempre vuelve a ser así.
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